Todos se preguntan porqué preferimos las grasas. Ya vimos la "teoría del gen ahorrador" que implica la preferencia de la grasa antes que cualquier otro nutriente.
¿Pero esta teoría alcanza para explicar dicha preferencia ? Y la respuesta es no.
Es ahí donde entra en juego nuestra conducta alimentaria.
Desde niños aprendimos que frente a cualquier demanda , la respuesta era comida. Así aprendimos que ante cualquier situación de stress , la recompensa inmediata era la comida, en particular, la grasa.Esto es en parte, porque la grasa es el nutriente con mayor densidad calórica, el de mayor palatabilidad y el mejor el desencadenar una respuesta hedónica (mayor placer)
Esto genera una recompensa o gratificación inmediata en nuestro cerebro (recuerden que es el "jefe" de nuestra conducta alimentaria).
Existen múltiples señales bioquímicas que informan al cerebro de la ingesta de grasa (señales que "demoran" en enviar la señal y por esto ingerimos grandes cantidades de grasa).
Una característica fundamental de la grasa es su baja capacidad de saciedad.
Probablemente a todos nosotros nos sucedió que "no podemos parar" de comer algún alimento con alto contenido de grasa.
Entonces recuerden
"si un alimento me genera esta respuesta, probablemente contiene grasa"
A este contexto biológico, agreguemos que vivimos en un mundo donde existe una gran disponibilidad alimentaria , con porciones cada vez mayores y de fácil acceso (esto se debe a su bajo costo de producción)
¿Se preguntaron alguna vez, por qué es más económico un paquete de galletitas o snack que una caja de cereales? ¿Por qué por centavos puedo aumentar el tamaño de mi hamburguesa o papas fritas? ¿Por qué hace 20 años no existía el alfajor triple?

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